ZACATECAS. César Lara Bañuelos, investigador y director de la Compañía de Danza Folclórica de Zacatecas, impartió una ponencia en la que explicó los cambios que adoptaron los bailes regionales de la entidad a través del tiempo.
Lo anterior, con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Folclor que se celebra hoy.
El académico detalló que desde los vestuarios de los danzantes hasta el uso de instrumentos son algunos elementos que fueron cambiando de manera constante.
Puntualizó que dichas modificaciones son realizadas por el pueblo “en las fechas de sus fiestas, con características y necesidades que tiene la misma gente.
“Por ejemplo, los penachos de los matlachines de Zacatecas, llamados de palangana, ahora son adornados con peluche por los danzantes. Ahí hay una evolución, porque antes eran hechos con plumas”, expuso.
Asimismo, señaló que la Danza de Caballitos sufrió modificaciones históricas, particularmente los vestuarios y adornos que utilizan.
“En la antigüedad se bailaba con huaraches porque era gente de rancho y su actividad así era, pero ahora se usan botines, pantalón charro y sombrero vaquero”, detalló Lara Bañuelos.
REGIONES Y SU ESTILO
El investigador también expuso un estudio documental que realizó sobre las diferencias de estas tradiciones en algunas regiones, “por ejemplo en la danza de Pastelera, en Río Grande, hacen la simulación de la espada.
“Por otro lado, en la de Rancho Grande, en Fresnillo, realizan una combinación muy peculiar, porque tienen una sonaja”, detalló.
Entre otras características, agregó que en el caso de la Danza de Caballitos incluso componen más sones, “que para efectos del baile se llaman mudanzas”.
Lara Bañuelos concluyó que los cambios en el folclor no pueden ser detenidos y evolucionan a la par que la propia sociedad, junto con sus costumbres.
