FRESNILLO. La Coordinación Municipal de Protección Civil (CMPC) y Bomberos mantiene bajo vigilancia 17 fincas antiguas, cuyo riesgo de colapso se ha elevado por los daños estructurales que han dejado a su paso las recientes lluvias y la humedad.
Víctor René García Magallanes, titular de la CMPC, explicó que el estado de estas construcciones varía; por ejemplo, algunas son consideradas vulnerables debido a su antigüedad y el deterioro progresivo que presentan.
Otras, en cambio, no necesariamente están en “mal estado”, sino que son inmuebles que, debido a las precipitaciones y los cambios de temperatura, podrían debilitarse y colapsar.
“El problema no es solo la lluvia. Cuando se seca el material después de mojarse, también se vuelve más frágil. La humedad puede reblandecer muros y techos; y al entrar en contacto nuevamente con el calor, generar hinchamiento, ocasionando grietas”, puntualizó.
LIMITACIONES PARA INTERVENIR
El titular de la CMPC expuso que de las 17 fincas que actualmente están bajo observación, no todas tienen una situación legal clara. Algunas están intestadas, otras cuentan con varios herederos y, en ciertos casos, no existe una seguridad jurídica que permita intervenir con mayor rapidez.
Por ejemplo, expuso, el hecho de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tenga bajo su protección algunas de ellas (sin tener claro cuántas), limita las acciones que puede realizar el Municipio.
No obstante, refirió que Protección Civil mantiene una estrecha vigilancia para prevenir accidentes, no sin antes precisar: “La responsabilidad del inmueble es del propietario, no del Municipio”.
DICTÁMENES Y MONITOREO
García Magallanes destacó que la CMPC trabaja con Desarrollo Urbano en dictámenes técnicos. Mientras se identifican riesgos visuales, esta última dependencia define si hay peligro inminente y las medidas necesarias.
“Estamos haciendo recorridos esta semana y continuaremos en la próxima para actualizar el censo de fincas en riesgo”, explicó.
En ese sentido, destacó que, por el momento, no se tiene detectada ninguna vivienda habitada que represente un riesgo inminente. “Todas están deshabitadas. No hemos encontrado por ahora algún inmueble en estas condiciones que tenga ocupantes”, precisó.
No obstante, el funcionario local destacó que el riesgo no se limita solo al colapso sobre la vía pública o peatones, sino que también incluye daños colaterales.
“Obras Públicas y Desarrollo Urbano nos ayudan a valorar si, en caso de desplome, puede afectar construcciones aledañas, no solo la calle”, indicó.
De esta forma, se busca evitar daños mayores que puedan alcanzar a familias vecinas y a la infraestructura urbana.
García Magallanes destacó que los ciudadanos también pueden participar activamente en la prevención. Invitó a quienes crean que sus viviendas o predios vecinos representan algún peligro, comunicarse con Protección Civil para realizar inspecciones.
“Hemos estado atentos a las llamadas de la ciudadanía; siempre estamos dispuestos a acudir y valorar cada caso”, concluyó.
DERRUMBE RECIENTE
Uno de los incidentes más recientes ocurrió este jueves, cuando un inmueble ubicado en la calle La Luz, casi esquina con Plateros, se desplomó parcialmente.
Al respecto, el titular de la CMCP destacó que el inmueble (un taller eléctrico en el pasado) desde hace tiempo estaba identificado como un riesgo potencial, y a pesar de los monitoreos, terminó por venirse abajo debido a las recientes lluvias y al deterioro acumulado.
¿QUÉ RIESGO ENFRENTAN LAS FINCAS?
1 Las lluvias reblandecen muros y techos, lo que puede generar grietas estructurales.
2 El secado posterior de materiales mojados aumenta la fragilidad en construcciones antiguas.
3 Aunque muchas fincas están protegidas por el INAH, también deben ser vigiladas y evaluadas.