FRESNILLO. Debido a que las ventas en el Mercado Poniente cayeron hasta 50 por ciento en comparación con años anteriores, los comerciantes optaron por cerrar sus negocios temporalmente o buscar otras fuentes de ingreso, informó Manuel García Solís, tesorero del lugar.
“Tenemos tres o cuatro locatarios que pidieron permiso para dejar sus espacios. Aunque no pierden la esperanza de regresar.
“Optaron por buscar un trabajo con un salario seguro en lugar de mantenerse en la incertidumbre”, dijo.
Reconoció que viven un panorama desalentador ante la caída de las ventas, incluso en una de las temporadas más fuertes como es la navideña.
“En otros años, desde noviembre, ya se veía la afluencia de gente. Ahora ni siquiera los paisanos que regresan de Estados Unidos están llegando como antes. Esto apagó totalmente la actividad comercial”, refirió.
García Solís indicó que esta problemática la padecen todos los locatarios, desde los que venden alimentos, frutas y verduras, hasta artículos personales.
DETERIORO EN LAS INSTALACIONES
El tesorero del mercado detalló que otro de los grandes desafíos que enfrentan los comerciantes son los problemas con la red de drenaje y las tuberías de agua potable, pues tienen cerca de 40 años de antigüedad.
Reveló que debido a ello alrededor de 140 locales tienen fugas y filtraciones constantes, que afectan el funcionamiento adecuado de los lugares.
“Las tuberías están carcomidas, ya no funcionan bien. Si no cerramos las válvulas de agua por las noches los tinacos amanecen vacíos porque las fugas son significativas.
“Esto se debe a que antes se usaban materiales de fierro que con el tiempo se oxidaron. Necesitamos cambiar todo el sistema de agua y drenaje simultáneamente, porque si se hace uno sin el otro no quedará bien”, explicó.
Manuel García puntualizó que aunque las administraciones anteriores realizaron trabajos para renovar ciertos tramos de drenaje, el problema persiste en la mayoría de las áreas del mercado.
Enfatizó que la solución requiere un proyecto integral que contemple tanto las tuberías de agua como el sistema de desagüe, pero el gasto es elevado, y por el momento, no cuentan con un presupuesto para la obra.
“Estamos esperando que la nueva administración municipal nos apoye. Necesitamos que envíen un ingeniero para evaluar la situación, hacer un presupuesto y definir qué puede aportar el mercado y qué puede cubrir el gobierno local”, consideró.
Dio a conocer que la actual directora de Plazas y Mercados, María Rafaela Carrillo Vargas, se acercó con ellos, pero aún “no está completamente familiarizada con los problemas de infraestructura del mercado”.
Por ello, mencionó que buscarán reunirse con el alcalde Javier Torres Rodríguez para plantearle las problemáticas del espacio.
“El Mercado Poniente siempre ha sido un lugar emblemático. Con el apoyo del gobierno local podemos revitalizar y devolverle su importancia para los comerciantes y los consumidores”, concluyó García Solís.