ARGENTINA. Aunque se conoce muy poco sobre lo que sucedió en las últimas horas de vida Liam Payne, la policía de Buenos Aires detectó que dos horas antes de que el cantante muriera traía un reloj puesto que hasta ahora está desaparecido.
De acuerdo con el medio La Nación, el intérprete de «Story Of My Life» fue captado por las cámaras del hotel con un Rolex que ya no traía cuando los forenses lo encontraron muerto.
«Sabemos, a partir de imágenes que fueron analizadas, que Payne, el día de su muerte, tenía puesto un Rolex. Lo llevaba en una de sus manos y lo tuvo, por lo menos, hasta entre dos y tres horas antes de arrojarse al vacío. Lo buscamos en la habitación del hotel CasaSur donde estaba alojado y no lo pudimos encontrar», informaron los detectives.
El reloj que está valuado en 30 mil dólares, ha sido buscado en el domicilio de las tres personas imputadas acusadas de abandono de persona y facilitación de estupefacientes y en las casas de las prostitutas pero no han logrado dar con él.
De acuerdo con la investigación, Payne murió por múltiples traumatismos y hemorragias internas debido a la caída, que se habría producido después del abuso de las sustancias.
Las pruebas reunidas hasta ahora son, entre otras, registros del teléfono móvil del cantante, estudios científicos y testimonios. Aún está en curso el desbloqueo de la netbook personal del artista (que está averiada) y otros aparatos incautados.
María Fernanda Tellez Albarran
Agencia Reforma