Minería a cielo abierto, se controla la contaminación
La innovación es la respuesta. La evolución de la ingeniería no siempre es la correcta, lo podemos observar en la expansión de ciudades sin planeación con edificaciones monstruosas de grandes alturas, donde todavía no hay una evaluación mundial certera del problema que acarrean en su abastecimiento de agua potable, drenajes y la recolección de residuos.
Lo mismo sucedió con las operaciones mineras, lo hemos comentado: la extracción subterránea fue un gran avance tecnológico con los tiros y socavones con ventilación adecuada. En la mitad del siglo 20 todavía no se tenían en cuenta los impactos ambientales en terreros (rocas que se consideran sin valor económico) y en presas de jales (residuos después de extraer minerales económicos).
Sin embargo, de nuevo, las innovaciones tecnológicas les dio reúso para extraer todo el metal económico. Un ejemplo muy cercano son los jales que han existido en los alrededores de la zona urbana de la ciudad de Zacatecas.
De Guadalupe a Tacoaleche, de estos jales de minas -antes del siglo 20- se descubrió que tenían valiosos contenidos de plata con escaso mercurio, por el tratamiento metalúrgico.
Pequeños mineros reciclaron el mercurio y lo vendieron después (mientras se podía). Sin embargo, las normas internacionales lo consideraron desde los años 80 de alta toxicidad a nivel mundial, y obligaron a almacenarlo en sitios autorizados.
El resultado, la disminución del elemento mercurio en terrenos superficiales, gracias a los procesos de recuperación de plata. En la actualidad desconozco qué hacen las autoridades ambientales federales con los residuos de mercurio resguardados.
Al igual que los lameros (materiales reciclados de los jales) de La Zacatecana, que se comprobó que tenían bajos contenidos tanto de plomo como mercurio y luego se realizó el terraceo del lugar, se reforestó para retención de los metales.
Al llegar los panistas a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), no sabemos si autorizaron o no vigilaron la extracción de estos lameros, considerados como sitios de control ambiental.
Esto demuestra que tiene que haber vínculos para violar disposiciones legales entre empresas y autoridades.
Según información de las empresas asociadas a la Cámara Minera de México, actualmente se tienen 124 operaciones minero-metalúrgicas: 53 son subterráneas, seis mixtas, 31 plantas y 34 son minas a cielo abierto, estas últimas generan el 59 por ciento del valor de la producción en la minería.
De las minas legalmente autorizadas para operación, tres son las que han provocado accidentes y desastres ambientales, las dos de carbón en Coahuila y el derrame de sulfatos en el río Sonora, todas de Minera México.
Demuestra que no hay más evidencias de contaminación para las comunidades y menos para casi 300 mil trabajadores de la industria minera, que laboran directamente con la extracción de minerales con toda la seguridad necesaria.
¿Qué se hace para evitar contaminantes que generan las actividades mineras?, lo seguiremos tratando.
SE TRANSFORMÓ Y SEGUIRÁ
Seguro que esos 36 millones de votantes (el 44 por ciento tiene estudios superiores) estuvieron informados de las políticas de la 4T.
Conocieron de los programas sociales, además algunos los recibieron. Supieron que era la primera vez que volteaba un gobierno a mirar el olvido que dejaron más de 30 años de gobiernos de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN).
Intentó acabar con la impunidad de grupos privilegiados al obligar a pagar al fisco a aquellos que, fuera de la ley, se les condonaban impuestos o les otorgaban créditos fiscales. Mejoró la recaudación fiscal, situación que debemos verla como el entendimiento de los empresarios a la aplicación de sus pagos a políticas de desarrollo, además, no les pedían a los funcionarios ser partícipes de sus ingresos.
Obras que permitirán a mediano plazo consolidar ingresos económicos y el desarrollo social por los empleos que generarán el Tren Maya, Transístmico, la movilidad nacional con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), unir las poblaciones del sur con autopistas que no terminaron los gobiernos anteriores, como la Barranca Larga-Ventanilla, que llega de las costas oaxaqueñas a la zona turística de Huatulco, por poner algunos ejemplos.
Qué decir del Tren El Insurgente, con escasos avances por el gobierno de Peña Nieto, ya funciona hasta la estación Santa Fe. Podrá estar terminado en su totalidad, probablemente, en diciembre de este año.
López Obrador demostró que un gobernante debe valorar, emprender y continuar obras que beneficien a la población sin importar el color político de los gobiernos.
Claudia Sheinbaum continuará políticas de Estado que son importantes como las sociales y esperemos que analice aquello que el gobierno de AMLO tuvo confusas decisiones.