El matador André Lagravere El Galo se impuso en la tercera corrida del Serial Taurino de la Feria Nacional de Zacatecas (Fenaza), al cortar dos orejas y consiguiendo salir a hombros.
Octavio García El Payo firmó una faena de gran calidad a un buen ejemplar de La Concepción, al que le cortó una oreja; y en su segundo, a pesar de la fuerte petición, no se le concedió la oreja, dando una clamorosa vuelta al ruedo.
Arturo Gilio el ánimo y convicción de triunfo lo llevaron a regalar un toro al que le cortó una oreja.
EL GALO, CONVINCENTE
Insurgente de 453 kilos, de La Concepción, fue el abre plaza que toreó André Lagravere. Este ejemplar le correspondía salir segundo, pero por una equivocación salió antes, corriéndose el turno.
Buen saludo con el percal, que después apostó en la colocación de las banderillas, buscando el lucimiento en los tres pares, cerrando con un par al violín.
Brindó al respetable para luego comenzar de rodillas su faena con un cambiado por la espalda que llenó de emoción al público presente en los tendidos de la Monumental Zacatecas.
El ejemplar de La Concepción tuvo fijeza, nobleza y transmisión, permitiendo al torero correr la mano diestra para dibujarse con dos series con trazo largo.
Una serie más firmada con tres portentosos derechazos y un pase cambiado muy templado que permitió además mostrar un buen pitón izquierdo.
El astado tuvo esa calidad, humillando y metiéndose a la muleta de un torero que supo estructurar una faena muy pausada y pulsada. Por alto terminó su firme y convincente actuación. Más de media espada en buen sitio dejó en la suerte suprema. El animal dobló y se le concedió una oreja.
LA FAENA DE EL PAYO
El Payo bregó con esa solera al animal para llevarlo al caballo, recibiendo así la primera ovación del público.
La faena estuvo dedicada a la afición de Zacatecas, que registró más de media entrada. El ejemplar de La Concepción fue muy justo de fuerza pero tuvo también la nobleza y calidad, la naturalidad y hondura de El Payo impresas en cada muletazo, en el que reinó la clase.
Series acompasadas y con esa naturalidad sobrada, el matador de pellizco y sentimiento que se quedó en las series de gran quilate por el derecho. La faena tuvo ritmo, pausa, y mando, con la suavidad y serenidad del torero que logró el abandono para transmitir una faena que se disfrutó.
Por el izquierdo, el infinito bajo los detalles pintureros que cerraron la obra escrita hoy en Zacatecas. Pinchazo y estocada con petición mayoritaria de oreja concedida. El toro fue aplaudido en el arrastre.
LA ENTREGA DE GILIO
Minero de 450 kilos, tercero de la tarde, primero del lote del lagunero Arturo Gilio. El de La Concepción tuvo menos fuerza: un ejemplar más parado con el que se entregó en todo momento Gilio, quien acortó las distancias pisando los terrenos y extrayendo con valor y determinación los muletazos.
Fue una faena solvente y con mucha técnica, siendo reconocido por el público que agradeció la indiscutible entrega del joven torero que este lunes, por vez primera, actuó bajo su nueva casa de apoderamiento. Pasaportó al primer viaje y fue aplaudido.
SUERTES DISPARES
El cuarto de la tarde, Mexicano, fue un animal con menos condición, poca acometida y más agarrado al piso. Octavio García El Payo brindó su faena al diputado federal y empresario taurino Pedro Haces.
Tuvo siempre a la mano los recursos para firmar una faena con valor, sacando los muletazos con poderío y terminando por inventarse una faena en la que se entregó en todo momento.
Fue una actuación de mucho tesón que terminó por ir a más. Tuvo mayoritaria petición de oreja que no se concedió, siendo abroncado el Juez de Plaza.
El Payo dio una vuelta al ruedo entre gritos de ¡torero, torero!
El quinto de la tercera corrida de feria llevó por nombre Aguamiel, de la ganadería de San Mateo, al que El Galo recibió con mucho garbo en un saludo capotero con variedad.
La facilidad con las banderillas se quedó en un buen segundo tercio que transmitió con fuerza al tendido. Se trató de una faena variada, en la que supo entregarse a un astado que no regaló nada. Logró romper y llevar a buen puerto al de San Mateo, teniendo petición de oreja tras pasaportar al primer viaje, que fue concedida.
EL CIERRA PLAZA
Arturo Gilio cerró plaza con Independiente, del hierro titular de La Concepción, destacando las chicuelinas que ejecutó tras la suerte de varas.
Brindis a la afición zacatecana y se puso de rodillas el torero lagunero que ligó así una serie poderosa.
El astado tuvo clase aunque la fuerza muy justa, pero el lagunero porfió de la mejor manera, dando el tiempo, la distancia y sacando muletazos de buena manufactura. Falló con los aceros y escuchó palmas.
Gilio apostó por regalar un sobrero de La Concepción, en el ánimo y el ímpetu de no escatimar en los esfuerzos.
Terminó por cuajar una faena importante y de buena nota, con series por el derecho con clase, mando y calidad, ligando muletazos largos y muy templados.
Fue una faena variada en la que transmitió a la afición, siempre con esa claridad de ideas, buscando por ambos pitones. Mató de gran estocada y cortó una oreja.
FICHA
Tercera Corrida del Serial Taurino de la Fenaza
Media plaza en la Monumental Zacatecas en tarde fresca
Se lidiaron toros de La Concepción (primero, segundo, tercero, cuarto, sexto y el de regalo), además de uno de San Mateo (quinto), de juego variado
Octavio García El Payo, oreja y vuelta al ruedo
André Lagravere, oreja y oreja
Arturo Gilio, palmas en su lote y oreja en el de regalo