ZACATECAS. La sequía por fin dio tregua a Zacatecas. Las lluvias del cierre de julio lograron que el número de municipios afectados por el fenómeno meteorológico disminuyeran de 47 a 22, lo que no ocurría en la entidad al menos desde hace dos años.
En tan solo 15 días, el territorio estatal que sufría condiciones de sequedad se redujo de 81 a 37.9 por ciento, el menor porcentaje registrado para esta temporada desde 2022, cuando la falta de agua comenzó a agravarse hasta la crisis del año pasado.
En 2024, el problema alcanzó su nivel más crítico a mediados de junio, cuando se extendió a 96.6 por ciento del suelo zacatecano. Pero con la llegada de las lluvias, los seis municipios que permanecían en sequía extrema salieron de esa clasificación: Villanueva, Tepetongo, Tabasco, Huanusco, Monte Escobedo y Jalpa.
Así, únicamente restan 11 demarcaciones en la categoría severa: las cuatro primeras, además de la capital, Valparaíso, Susticacán, Jerez de García Salinas, El Plateado de Joaquín Amaro, Fresnillo y Calera de Víctor Rosales.
Mientras que otras 11 están en moderada, nivel al que descendieron Monte Escobedo y Jalpa, junto a Sombrerete, Sain Alto, Morelos, Momax, Jiménez del Teul, General Enrique Estrada, Chalchihuites, Florencia de Benito Juárez y Atolinga.
Expectativas superadas
De acuerdo con la más reciente actualización del Monitor de Sequía en México (MSM), con corte al 31 de julio, la tendencia en Zacatecas ya se revirtió: ahora, la mayor parte del territorio está fuera del fenómeno y ningún municipio en condiciones extremas.
En el mismo periodo de 2023 había sequía en 100 por ciento del estado. La mejora superó incluso las expectativas de la Dirección Local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que estima que 80 por ciento de la entidad libre el problema para finales de septiembre.
El subdirector del Área Técnica de la Conagua en Zacatecas, Cruz González García, advirtió que aún hay condiciones “anormalmente secas”, presentes en 12 municipios, sin embargo, “esto no se considera propiamente sequía”.
Agregó que el nivel de las presas se ubica en 51 por ciento, en promedio, lo que garantiza el ciclo agrícola de este año y el siguiente. Según el reporte de este martes, la Julián Adame (Tayahua) alcanzó 100.5 por ciento de su capacidad, seguida de la Miguel Alemán (Excamé), a 94.7 por ciento.
En contraste, las presas que no logran recuperarse son Santa Rosa y Leobardo Reynoso, cuyos niveles están a 32.2 y 21.1 por ciento, respectivamente; ambas se encuentran en Fresnillo, un municipio que continúa en sequía severa.
“Luna de miel”
Gerardo Luis Cervantes Viramontes, titular de la Secretaría del Campo (Secampo), afirmó que el sector agropecuario “vive una luna de miel” gracias al temporal de este año, por lo que se esperan una buena producción de cultivos y beneficios en la ganadería.
Informó que, al cierre de la siembra de frijol, de 618 mil 119 hectáreas se cubrió cerca de 100 por ciento, “faltaron unas cuantos puntos que están focalizados, pero es una parte muy pequeña”.
Aun cuando la fecha óptima para sembrar la semilla venció a finales de julio, “todavía algunos temporaleros continúan con esta actividad, pero ya es un arriesgue pues existe el riesgo de una helada temprana que afecte sus cultivos”.
También hubo zonas de Villa de Cos y Sombrerete anegadas por las lluvias, pero se atendieron “de inmediato para que el daño fuera mínimo”.
Cervantes Viramontes resaltó que otro factor para recuperar la producción agrícola en Zacatecas fue que “varios productores optaron por cambiar de cultivo a maíz y flor de calabaza, principalmente”.
Con respecto al sector pecuario, mencionó que el principal beneficio es que“los bordos están llenos en su mayoría y desbordando, en algunos casos lograron reabastecerse y eso es muy bueno”.
A esto se suma que los pastizales están con renuevos, lo cual disminuye la necesidad de comprar pacas para los animales.