FRESNILLO. En recientes semanas se registró un importante repunte de hasta un 25 por ciento en las visitas de peregrinos al Santuario del Santo Niño de Atocha, así lo dio a conocer Guillermo López Moreno, delegado de la comunidad Plateros.
Explicó que estas visitas son en su mayoría de peregrinos que vienen de Estados Unidos, y otra cantidad importante corresponde a devotos de la zona norte del país.
“El mes de julio se caracteriza por ser un mes con mucha afluencia de peregrinos de Estados Unidos; si bien no en la misma cantidad que hace dos años, antes de la pandemia por COVID-19, ha existido una importante visita de connacionales”, expresó el representante social.
Refirió que a partir del 1 de agosto esperan un contingente de autobuses de peregrinos que provienen del interior del país.
“Esta semana ha sido regular, estamos saliendo de una situación complicada. Son diferentes aspectos los que nos han pegado: pandemia y percepción de inseguridad.
“Lo que hacemos es que les damos un recibimiento cálido, que se sientan cobijados por el comercio, ya que nosotros somos los principales beneficiados”, detalló López Moreno.
Destacó que las ventas aumentaron en un 20 por ciento a comparación de los dos últimos años; y a pesar de que varios comerciantes cerraron sus locales a finales de año, varios reabrieron sus negocios.
Seguridad policial
El delegado de Plateros destacó que la percepción de los visitantes ha cambiado, muestra de ello es que los peregrinos de otros estados, como Guadalajara o Aguascalientes, viajan en vehículos o autobuses sin la compañía de policías estatales, como sucedió a inicios de año.
Celebró que otro gran acierto que tuvo el gobierno estatal fue el de instalar un destacamento de la Policía Estatal (PEP) en la comunidad, cuyos agentes hacen rondines en vehículos o a pie; y esto ha incrementado y la percepción de seguridad de los peregrinos.
“Al ver la presencia de la policía los peregrinos se sienten seguros. El apoyo de los comerciantes también ha sido importante para que ellos se sientan seguros, cuidados y cobijados”, concluyó Guillermo López.