MADRID. Los ataques de represalia de Estados Unidos contra las milicias proiraníes en el noreste de Siria tras la muerte de un contratista se han saldado por el momento con 16 muertos, entre ellos tres militares sirios, según el nuevo balance proporcionado por activistas.
La organización del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha podido identificar, además de a los tres militares, a otros once sirios que trabajaban para estas milicias proiraníes, afines a Damasco.
Los ataques ocurrieron contra un almacén de municiones iraní en el barrio de Harabish de la ciudad de Deir Ezzor, contra posiciones en la campiña de Al Mayadin y en la campiña de Al Bokamal — en esta última posición estaría desplegado un destacamento de la Guardia Revolucionaria iraní –.
Las milicias proiraníes respondieron a estos ataques con nuevos lanzamientos de cohetes contra una base militar estadounidense cercana al yacimiento de petróleo de Al Omar, que se saldaron sin víctimas ni daños de consideración.
Los últimos incidentes comenzaron el jueves por la tarde, cuando un ataque de estas milicias dejó un contratista muerto y seis heridos, identificados como cinco miembros del servicio estadounidense y otro contratista.
En respuesta, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó una serie de bombardeos contra instalaciones utilizadas por «grupos afiliados» a la Guardia Revolucionaria.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, ha explicado que Biden ha ordenado «ataques aéreos de precisión (…) en el este de Siria contra instalaciones utilizadas por grupos afines a la Guardia Revolucionaria Islámica iraní».
Tras los ataques Biden ha querido bajar la tensión y ha subrayado que Estados Unidos «no busca un conflicto con Irán, pero está preparado para actuar con decisión para proteger a su gente».
Horas después de los ataques han sido disparados diez cohetes contra el Pueblo Verde, que aloja a fuerzas estadounidenses y de la coalición internacional en el noreste de Siria, según ha informado el Comando Central estadounidense. No han causado daños materiales ni personales en la base, pero uno de los cohetes impactó contra una vivienda a cinco kilómetros de la base y ha provocado heridas leves a dos mujeres y dos menores.
Cortesía Europa Press – Agencia Reforma