Zacatecas se encuentra en una crisis de residuos sólidos en todos los municipios y la capital es un foco rojo en este problema, aceptó la titular de la Secretaría del Agua y Medio Ambiente (SAMA), Susana Rodríguez Márquez.
En el caso del relleno sanitario intermunicipal, expuso que se tiene una disponibilidad de apenas dos metros de altura en la segunda celda para recibir los desechos de Zacatecas, Guadalupe, Morelos y Vetagrande, por lo que a este espacio le restan sólo un par de años de vida útil.
“He tenido reuniones con el presidente de la capital del estado, Jorge Miranda Castro, quien también preside la Junta Intermunicipal para la Operación del Relleno Sanitario (Jioresa), porque la segunda celda está casi al tope y opera en condiciones muy difíciles”, advirtió la funcionaria.
Para prolongar la viabilidad del relleno de la zona metropolitana se necesita cambiar la geomembrana que evita el paso de los lixiviados al subsuelo y, con ello, la contaminación de los mantos freáticos que estén cerca.
Esto requiere una inversión aproximada de 4 millones de pesos, con los cuales sería posible ampliar hasta 10 años la vida útil del vertedero.
“Actualmente sólo se hace un arreglo mínimo. No se hace una reparación, cuesta […], pero luego es más grave el problema de la remediación [ambiental]”, alertó Márquez Rodríguez.
Problema estatal
La secretaria de Agua y Medio Ambiente explicó que, sin excepción, “en ninguno de los municipios existen rellenos sanitarios, se trata de tiraderos de basura que deben atenderse de manera diaria y se carece de los recursos necesarios para cumplir con estas tareas”.
Además, “todos los tiraderos están abandonados, no solo por el estado, sino también por los ayuntamientos”. En parte, esto es consecuencia de que dichos espacios ocupan terrenos que no fueron debidamente deslindados de ejidos o no son parte del patrimonio de los Municipios.
Susana Rodríguez añadió que se deben cumplir los requisitos establecidos por la Norma Oficial Mexicana (NOM) 085 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que exige que los rellenos no estén cerca de viviendas o cuerpos de agua.
Sin embargo, la funcionaria aceptó que en los Municipios, “donde ven un espacio libre, ahí tiran la basura”, lo que conlleva problemas de contaminación porque los desechos liberan lixiviados.
Mencionó que un adecuado manejo incluye la vigilancia del tipo de residuos depositados en cada uno de estos lugares, “porque no pueden tirar animales muertos o desechos hospitalarios y la legislación establece que es responsabilidad de los ayuntamientos realizar este tipo de trabajos”.
Sin dinero
Frente a las obligaciones ambientales, la falta de recursos económicos imposibilita a los Municipios acceder a la tecnología necesaria para garantizar un buen manejo de residuos sólidos; “de hecho, en este momento, todos los ayuntamientos están solicitando ayuda para este tema”.
La propuesta de la SAMA para mitigar el problema es la construcción de rellenos sanitarios intermunicipales “que tengan una generación de basura similar para que sea equitativo el costo de su manejo”.
Cada uno de los espacios de este tipo costaría entre 4 y 5 millones de pesos. “En ese supuesto están Luis Moya, Tayahua [Villanueva] y Nochistlán, que también tienen un problema, por mencionar algunos, porque es casi empezar de cero”.
Sin embargo, las posibilidades financieras para están limitadas incluso desde el estado, dado el recorte presupuestal que se proyecta para la SAMA para 2023, al pasar de 313.8 millones a 246.4 millones de pesos.