Los paisajes urbanos de Zacatecas inspiraron a Carlos Eduardo Gutiérrez Medrano, director de Día de Muertos, película que actualmente está en cartelera y que en su primer fin de semana logró ocupar el cuarto lugar en las taquillas nacionales.
Carlos Eduardo es zacatecano por adopción, pues desde primaria hasta su carrera profesional vivió en Guadalupe, aunque actualmente radica en su natal Jalisco.
Sin embargo, “siempre tenía en mente a Zacatecas y quería que estuviera parte de ese estado en la película”, mencionó al explicar que a nivel gráfico se puede apreciar la influencia de la Catedral, la Fuente de los Faroles (que aparece en ciertos momentos del filme) y el estilo barroco de edificios y monumentos.
“Gran parte de la cinta estuvo inspirada en el tiempo que viví en Zacatecas, pero me quedó mucho qué contar, esperemos que el público nos dé el beneficio de tener una secuela”, expuso en entrevista exclusiva para NTR.
Aseguró que defender el cine mexicano no es una tarea fácil en un mercado dominado por Hollywood. “Fue un trabajo complicado en muchos momentos, como levantar el presupuesto, la calidad, que nos creyera la gente, cada paso que dábamos era un reto”.
“Estuvieron tres películas gigantescas: Terminator, Maléfica y Los locos Adams, que son franquicias que llevan muchos años. Nunca vamos a encontrar un espacio libre. El mayor de los retos es creérnosla y decirles a los demás que sí se pueden hacer las cosas en México”.
Día de Muertos habla de “entender que como mexicanos estamos predispuestos a reírnos de la muerte, pero no necesariamente es así, ni nos enfocamos en aprovechar a la gente que está con nosotros. Muchas veces los extrañamos cuando no están, pero descuidamos a quienes tenemos hoy aquí”.
Abrirse paso por el camino del cine de animación fue complicado para el equipo, ya que el principal obstáculo fue el presupuesto. La idea del guion surgió en 2003; no obstante, se registró hasta 2007 y en 2012 por fin consiguieron recursos para la preproducción.
“Si hubiéramos tenido el presupuesto desde el día uno, no habría tardado más de tres años. Me dejó muy grabado el tema de pedir muerto en lugar de pedir Halloween, de cantar ‘el muerto pide camote’, pues viví en Guadalupe”.
“Ahí en la Alameda, cuando era niño, en Día de Muertos se ponían todos los puestos de venta de cosas, y cuando pedíamos muerto, a veces no nos daban dulces, sino fruta, tradiciones diferentes al Halloween”, sentenció.
Carlos Eduardo terminó su carrera en Diseño en Guadalajara; desde entonces participó en más de 15 largometrajes y más de 500 comerciales de televisión.
Asimismo, fue presidente de medios creativos e interactivos para la Cámara de Alta Tecnología, y se desempeñó como director general del proyecto Ciudad Creativa Digital, entre otros.
El cineasta agradeció al público que acudió a ver la película y prometió “tener a Zacatecas aún más presente en la siguiente producción”.