MÉXICO .-A cinco años de su aprobación, el reto de la reforma energética sigue siendo la transparencia, señalaron especialistas.
Miriam Grunstein dijo que Pemex continúa acaparando el mercado energético aun cuando el Gobierno federal aseguró que con la reforma éste se diversificaría.
En un foro organizado por el Instituto Belisario Domínguez en el Senado, indicó que la empresa del Estado es la que más contratos ha recibido en el marco de las rondas petroleras, además de que es el principal productor de petróleo.
Grunstein planteó que este predominio difícilmente se revertirá en el corto plazo, toda vez que existe la figura de las asignaciones, la cual faculta al Ejecutivo federal a dar asignaciones a Pemex.
“Si quieren que esto sea un mercado competitivo, ¿por qué mantienen un artículo en donde el Ejecutivo federal, alegando interés nacional, le puede dar más asignaciones a Pemex?”, cuestionó.
“En este momento, con un nuevo gobierno, si quieren parar la reforma energética lo que pueden hacer es darle un montón de asignaciones a Pemex y cercar a los particulares en torno al predominio de Pemex”, agregó.
Para la especialista, ante este panorama, la preocupación no debe ser la participación de la iniciativa privada en el sector energético, sino la falta de transparencia en los procesos de exploración y extracción de hidrocarburos.
Señaló que, si bien las rondas petroleras han sido buenos ejercicios, es en los procesos de exploración y extracción donde se encuentran los agujeros negros.
Advirtió que esta falta de transparencia genera sufrimiento porque muchos de los proyectos en marcha afectan a las comunidades, sobre todo indígenas.
“En la página de la Secretaria de Energía no hay manera de encontrar ni las evaluaciones de impacto social ni los resolutivos sobre las evaluaciones de impacto social ni los documentos relacionados con la consulta pública a las comunidades indígenas”, expuso.
Para Laura Bolívar, este tema es de especial importancia porque con la reforma energética se estableció la exploración y extracción de hidrocarburos como una actividad preferente.
Esto significa, explicó, que está por encima de tareas como la agricultura y la minería.
“¿Qué connotación tiene la actividad preferente? Cuando en un mismo territorio convivan agricultura, silvicultura, ganadería, minería, en el 92 minería estaba por encima de estos tres, ahora con estas reformas los hidrocarburos están por encima de todos”, expresó.
Afirmó que esta es una de las razones por las que se están generando conflictos en comunidades afectadas por proyectos de energía.
En su turno, Jaime del Río se pronunció a favor del plan del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de construir dos refinerías y modernizar las existentes.
El especialista mencionó que ahora se aprovecha únicamente el 50 por ciento de la capacidad de refinación instalada.
No obstante, resaltó que un mundo en donde el petróleo dejará de ser la principal fuente de energía en los próximos 20 o 30 años, ese proyecto tiene que desarrollarse en el cortísimo plazo.
“Hacer una refinería lleva años y ante la reducción del petróleo como fuente principal de energía, probablemente ya no tendría resultados tan positivos”, advirtió.