Zacatecas.- El obispo Sigifredo Noriega Barceló advirtió sobre la necesidad de que la Iglesia se acerque a la sociedad, con el objetivo de concretar la nueva evangelización en un mundo secularizado, y que además sirva como forma de buscar la paz “a largo plazo”.
“Al acercarnos, no sólo me refiero a visitarlos a sus casas, que es muy importante, sino acercarnos a sus necesidades y aspiraciones.; lo que llama el Papa Francisco I, acercarnos a la periferia, es como vamos a cumplir el mandato de evangelizar”
Aunque reconoció que uno de los temas prioritarios en el país es la búsqueda de mecanismos para controlar la violencia, consideró que en la entidad no hay focos rojos; por ello, llamó a la sociedad a trabajar en la prevención, antes de que “lo más grave llegue”.
“Como Iglesia, la atención prioritaria son las víctimas de la violencia, del acompañamiento. Ya viene un segundo momento, que es la formación de educación para la paz. Si no definimos esto, lo otro no tiene futuro”, agregó.
Estas fueron otras de las conclusiones logradas durante la más reciente asamblea plenaria de obispos católicos, que tuvo verificativo en el Estado de México, para que el evangelio influya en la vida de las personas.
“Al acercarnos, no sólo me refiero a visitarlos a sus casas, que es muy importante, sino acercarnos a sus necesidades y aspiraciones.; lo que llama el Papa Francisco I, acercarnos a la periferia, es como vamos a cumplir el mandato de evangelizar”, explicó Noriega Barceló.
En el tercer momento se prevé la colaboración con las autoridades civiles, pues aunque consideró que las acciones del Ejército Mexicano sirven para controlar, es necesaria la construcción de la paz a un plazo más largo.
Añadió que el encuentro sacerdotal que tuvo verificativo en la ciudad de Zacatecas fue de naturaleza diferente, razón por la cual se trataron únicamente temas espirituales, particularmente.
Y en vísperas de la celebración de la Navidad, Noriega Barceló consideró que es un buen momento para reflexionar sobre las acciones del año, a partir del próximo domingo, que comienza el adviento.
“El reto que tenemos como Iglesia es ir al espíritu más profundo de la Navidad, que es la fe y nacimiento de Jesucristo, y nace en un lugar y un tiempo, que es en la familia. Desde ahí, nosotros queremos alargar la navidad”, dijo el religioso.
Recordó que el tiempo de adviento es para la conversión, lo que al final de las cuatro semanas puede traducirse en planes para la persona, y para la celebración espiritual de la Navidad, el 24 de diciembre.