Zacatecas.- Ante la falta de diálogo con autoridades de salud, trabajadores del Centro Estatal de Transfusión Sanguínea (CETS) iniciarán mañana miércoles paros escalonados para exigir la destitución de la directora Elma Ivonne Sotelo Ham.
No hay nada personal contra la doctora, pero al recibir quejas diariamente de los compañeros por maltratos, es una cosa que no pudimos dejar pasar; por eso acudimos al sindicato, a las instancias respectivas, para tratar el asunto”
Norma Angélica Castorena Brrelleza, secretaria general en la sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), confirmó estas acciones de presión.
Tras recordar que éstas fueron anunciadas al titular de los Servicios de Salud de Zacatecas (SSZ) Raúl Estrada Day, desde el pasado lunes.
Hace una semana los trabajadores realizaron un paro de labores en las instalaciones de esta área para denunciar malos tratos por parte de la directora, quien dijeron entró como recomendada de la hermana del gobernador Miguel Alonso Reyes.
Sin dejar de brindar el servicio a la población, hasta este martes mantenían la exigencia de destituir a Sotelo Ham del cargo, pese a que las autoridades pidieron a los quejosos una oportunidad para que la directora cambiara su actitud.
Con este paro de labores solamente dotarán de unidades de sangre a los hospitales del estado, en caso de que se presente una urgencia, pero el resto de las actividades serán detenidas.
El representante del sindicato de trabajadores del CETS, Felipe Molina, explicó que la medida se tomó porque no existe respuesta positiva a sus peticiones.
“No hay nada personal contra la doctora, pero al recibir quejas diariamente de los compañeros por maltratos, es una cosa que no pudimos dejar pasar; por eso acudimos al sindicato, a las instancias respectivas, para tratar el asunto”, expresó.
Entre los malos tratos–comentaron los trabajadores- se encuentra que Sotelo Ham les da una orden a uno de ellos, mientras a otro trabajador le da una contraria, lo que genera fricciones entre el equipo de trabajo.
Además, se mostraron preocupados porque la funcionaria ni siquiera respeta la norma oficial mexicana para la donación de sangre, lo que ha derivado en un déficit en el abastecimiento de unidades.
Se trata de la norma 253, cuya guía establece, entre otros temas, que el doctor puede revisar el caso si hay una inconformidad del donador, pero la doctora Sotelo no lo permite.